Eres suspiro dentro de botella
latido de corazón de estrella
eres la huella imborrable
en mis recuerdos
Disponible a la vuelta de la esquina
no hay quien te perdone
sensible a una mirada
de cualquiera que se asome
Tus palabras comprometen mis pensamientos
tu voz rebota en el interior de mi cabeza, cual eco hondo
la estación es un verano interminable
donde se gestan par de pálpitos infinitos
En este espacio cerrado no hay una sola duda; estamos de lleno en certezas dentro de nuestra propia cárcel.